Pages

15 de enero de 2014

10 de enero.

El 10 de enero nació mi primera sobrina: Blanca. No he podido o no he querido escribir en el blog sobre eso porque la mezcla de sentimientos ha sido bastante confusa. Pero, afortunadamente, esa noche sí escribí todo lo que me vino a la cabeza:

10 de enero de 2014.

Bueno, se acaba ya un día muy emocionante.

Hacía tiempo que no tenía tantas sensaciones distintas en el mismo día, y he acabado agotada, yo creo que por culpa de la mezcla.

Por encima de todas, alegría por la llegada de Blanca. Y también un poco de estupefacción, no me podía creer que fuera real.

Decepción al principio por un roce con mi hermana, aunque luego me ha dicho que estaba nerviosa. En el fondo no había que ser adivino para suponer que lo estaba y yo debería aprender a reaccionar a estas cosas de otra forma la verdad. Y ya estoy en el camino de intentar cambiar eso (de esto hablaré en otra entrada) pero, al igual que no me consiento a mí misma que los nervios, la tensión o un mal día deriven en tratar mal a la gente que me quiere y a la que quiero, no tengo por qué consentírselo a los demás.

Después de esa decepción, rabia por la caída de las ilusiones y por pensar que quizás no voy a ser tan importante en la vida de Blanca como pretendía serlo. Al fin y al cabo, sólo soy una de sus cuatro tías. Y la única que la coge en brazos más tensa que en el bautizo de un gremlin, por cierto.

Nostalgia ante un nuevo cambio en mi hermana. Ya sentí lo mismo el día de su boda que coincidió con el día que se fue a vivir con su marido y dejó nuestra casa. Esa sensación de que se aleja, de que cada vez somos menos aquellas dos que compartían habitación en la Sierra, sentido del humor y que se reían por chorradas.

Tristeza porque mi padre se lo haya perdido.

Pánico al pensar que si yo alguna vez tengo un hijo mi madre pueda perdérselo.

Miedo y pena por si nunca llego a experimentar yo lo que se siente teniendo un hijo.

Inseguridad al cogerla, al vestirla ... nunca he estado cerca de un bebé (no como las hermanas de mi cuñado que ya tienen varios sobrinos) y se me nota, oh dios si se me nota ...

Cansancio por tantas horas en el puñetero hospital.

Muchas emociones. Normal que esté hecha polvo. Pero, sin duda, ha sido un día importante”.

Cuando mi hermana se casó me ilusionaba muchísimo tener un sobrinito. Cuando por fin se quedó embarazada y durante estos últimos 9 meses todo el que me conoce bien sabe que conocer a Blanca era una de las ilusiones más grandes que he tenido nunca en mi vida. Y me lo imaginaba todo idílico: sólo sonrisas, todos juntos, yo disfrutando de la enana junto con mi hermana y mi madre, cogiéndola, moneando con ella...

Pero después la realidad se impone y no sé por qué la vida es tan perra pero las cosas nunca son como nos las imaginamos. 

Sonrisas hay, sobre todo cuando la miramos, es tan guapa … Pero luego hay muchísimos nervios, miedo, falta de experiencia, incertidumbre … el no saber por qué llora o cómo conseguir que coma.

En cuanto a lo de monear con ella … complicado.

La toco en la tripa. “No la toques en la tripa, tócala mejor en el pie”.
La toco en el pie. “No la toques en el pie”.
La voy a vestir. “No, mejor lo hago yo”.
La cojo. “No pones bien el brazo”.
Le voy a hacer una foto. “Bueno la dejamos tranquila ya que duerma la siesta”.
Vamos mañana a ayudarte con lo que quieras. “No, no hace falta”.

Y bueno, que me lo haga a mí pues me da muchísima pena pero lo que realmente no soporto es que aleje a mi madre. Mi madre está deseando poder ayudarla, poder desvivirse, apoyarla, aconsejarla y disfrutar de su nieta, pero mi hermana, quiero pensar que inconscientemente, la está apartando cegada por los nervios y la tensión de no saber por dónde empezar con un bebé. Nervios que me parecen completamente lícitos. Lo que no lo es es la reacción con los demás. 

Espero que cuando todo se normalice podamos aproximarnos a la situación idílica que llegué a imaginarme aunque, pase lo que pase, desde el primer momento que vi a Blanca supe con total certeza cuatro cosas.
  • Que ya la quería muchísimo, de forma incondicional. Si esa sensación se tiene con una sobrina, ¡cómo será la sensación con un hijo!.
  • Que Blanca me tendrá para todo lo que ella quiera, para ayudarla en todo lo que necesite, aunque su madre de momento no me necesite para nada. 
  • Que no se puede buscar o forzar el amor de nadie. Durante un día me obsesionaba la idea de que mi hermana no me deje arrimarme y no llegar a ser más para ella que otra tía más. Pero luego (con ayuda) abrí los ojos. No se trata de ser la que más está, la que mejor la coge o la que más experiencia tenga con ella. Yo la quiero y le voy a dar todo mi amor y mi cariño. Y será decisión de ella quererme igual o no hacerlo.

Lo último de lo que me di cuenta fue que quiero tener hijos cuando llegue el momento. Tuve dudas durante los meses anteriores sobre si sería capaz de tener un hijo sola (ver a una chica haciendo malabarismos con un carrito en un brazo y un bebé en el otro sin ninguna ayuda justo antes de que por fin apareciera su marido como cuando Gandalf aparece con una luz blanca detrás pues como que no ayudó a despejar mis dudas ...) pero ahora me doy cuenta de que no importa, sola o acompañada, tengo que vivir esa experiencia si la vida me lo permite.

PD: encima de lo que ya tenía, voy y entro al cine a ver un dramonazo titulado "la ladrona de libros". Bonita sí, ahora, triste un rato... ¡a dormir!. 

Te mando un besito fuerte Blanca, bienvenida al mundo :)

12 comentarios:

  1. Lo mejor y más bonito es lo que tú des sin esperar nada de vuelta. Y eso es lo que te hace tan grande. Estás dando los pasos por un camino que es difícil pero que te llevará a lo mejor del mundo, a ti.

    Ya lo sabes, pocas muy muy pocas personas en este mundo miran hacia sí mismas y ponen la energía en cambiar y aceptar. Y tú eres una de ellas.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias. Por todo. Y por ayudarme a abrir los ojos cuando los tengo pegados :*

      Eliminar
  2. 100% lo que dice Lhotse, tú eres así :)

    Y lo que te dije, la relación con Blanca será la que entre las dos construyáis poco a poco, y no tiene nada que ver con si tiene más tías o no. Conociéndote se que puede llegar a ser muy especial.

    Y mucho ánimo. Los primeros días con un bebé son muy estresantes, pero pasan, y luego hay toda una vida por delante. Cuando nació mi niña recuerdo mucha gente que quería ayudar, todos con buena intención, y unos con mejor tino que otros. Pero al final lo que queda no es quién hacía qué, sino que los que nos querían estaban allí para compartir y participar en unos momentos inolvidables. Porque el tiempo pasa muy rápido.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. :) Sí, hoy me has hecho ver que todo es mucho más fácil. Estar ahí para Blanca y punto. No importa nada más ni tengo que darle tanta importancia a las reacciones de mi hermana. A ver si se me pasa este catarro que estoy incubando y puedo ir a verla pronto :)

      Eliminar
  3. Hola!! Tu entrada me ha recordado algo y quiero compartirtelo: tengo una tía (hermana de mi madre) que estuvo ahí para mi desde el momento en que abrí los ojos por primera vez, ella y a pesar de que tengo 7 tíos más, siempre estuvo conmigo para todo, en los recuerdos de toda mi vida, siempre estuvo presente ella y ahora es para mi como una hermana, mi gran amiga mi gran confidente. Sin afán de parecer muy autoritaria al dar este consejo, que no te importe nada más simplemente piensa en estar ahí para Blanca, siempre siempre al final eso es lo que cuenta y es lo que sin duda se valora...Lo de tu hermana es completamente normal, creo sin temor a equivocarme que ella tambien esta pasando por un mar de emociones!!! No te conozco, pero me encanta tu blog!! Espero no te moleste!! Un abrazo fuertisimo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchísimas gracias por compartir conmigo tu experiencia Angie!! Sí, tienes toda la razón, lo importante es estar ahí para ella y que sepa que la quiero muchísimo :) ¡Me hace mucha ilusión que te guste mi blog! A mí me encantan tus comentarios :) Un besazo!!

      Eliminar
  4. Gracias por responder!!! Tengo tanta ilusión de conocer España!! Creo que es bueno tener un contacto del otro lado del mundo!!! :)) que pases un maravilloso dia!!

    ResponderEliminar
  5. Yo no veo a mis sobrinos tanto como me gustaría porque vivo en otra ciudad y no le caigo especialmente bien a mi cuñada. sin embargo, como dice mi madre, los niños son listísimos (y mis sobrinos más!! ;-)) y saben perfectamente quién les quiere de verdad y quien no.
    Así recuerdo que mi sobrino mayor las primeras palabras que dijo fueron: "papa, mamá y tita", su otra tía era "la otra tita". Yo no estoy con ellos todos los días, pero saben que les quiero con toda mi alma.
    En cuanto a tu hermana, es que tiene que ser un estrés total que una cosa tan pequeñita e indefensa dependa totalmente de ti!! Seguro que poco a poco se va calmando. ¡¡Disfruta!! Bss!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me consuela lo que dices, que a pesar de no verles tanto como te gustaría, ellos saben que les quieres un montón :) Fíjate cuando encima me decido a ir a verla me pillo un catarrazo horrible, al final la voy a ver cuando ya lleve aparato! :P Me encanta "papa, mama y tita" jajaja.

      Eliminar
  6. Que bonita la entrada... y cuantas emociones / sensaciones. Opino como ellos, lo importante es estar ahí. A veces idealizamos tanto las situaciones, que luego sufrimos pequeñas decepciones, pero si lo vemos desde fuera al final nos damos cuenta de que tampoco es para tanto y que poco a poco las cosas vuelven a su sitio. Aun me acuerdo de la anécdota que contaba meses atrás de tu hermana y el bocadillo de jamón serrano xDD. Y opino como tú, yo tampoco me quiero perder esa sensación.
    Disfruta de tu sobri!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Justo, en los primeros días estaba que me subía por las paredes pensando que no era como me lo había imaginado, pero luego ya me he calmado y lo he pensado con objetividad. Las cosas acaban volviendo en su sitio y ni son tan perfectas ni tan imperfectas, tienen sus cosas muy buenas y sus cosas malas. Jajaja, sí, lo del bocadillo de jamón parece que fue hace un siglo ya!! :) Un besito guapa!

      Eliminar